martes, 26 de agosto de 2008

Cine: Bolivia para todos

´BOLIVIA PARA TODOS´ ES EL NOMBRE DEL TELEFILM REALIZADO POR EMILIO CARTOY DÍAZ QUE ANALIZA LA COMPLEJA CRISIS POLÍTICA Y SOCIAL QUE ENFRENTA EL GOBIERNO DE EVO MORALES. EN ESTA ENTREVISTA, EL RECONOCIDO PRODUCTOR AUDIOVISUAL CUENTA CÓMO DESARROLLÓ UN TRABAJO QUE REVITALIZA EL GÉNERO DEL DOCUMENTAL POLÍTICO Y ABRE UN DEBATE SOBRE SU USO COMO VALIOSA HERRAMIENTA DE COMUNICACIÓN.
El presidente de Bolivia Evo Morales Ayma fue ratificado con más del 67 por ciento de votos positivos en el referéndum revocatorio y logró además triunfos en los departamentos de La Paz y Cochabamba, cuyas prefecturas estaban en manos de la oposición.

Estrenado por Canal 7 pocos días antes del plebiscito, el telefilme Bolivia para todos producido por Emilio Cartoy Díaz -director de las escuelas TEA Imagen y Radio TEA y realizador de Historia de dos orillas- documenta los cambios introducidos a partir de la asunción de Morales el 22 de febrero de 2006 y la resistencia de las elites de la región de la Media Luna, conformada por los departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija. Con más de quince meses de producción, el documental fue grabado en distintas locaciones de Bolivia y cuenta con el análisis de intelectuales latinoamericanos y los testimonios de protagonistas de la actualidad política boliviana.

Difundido a través de canales de distribución alternativos, Bolivia para todos aborda la historia reciente de ese país, desde las movilizaciones sociales iniciadas en los 90 contra los gobiernos de Hugo Banzer Suárez y luego de Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Mesa hasta las reformas impulsadas por el gobierno de Morales mediante la nacionalización de los hidrocarburos, la distribución comunal de tierras y la Asamblea Constituyente.

“La televisión y los medios audiovisuales necesitan más que nunca trabajar sobre la realidad latinoamericana. Bolivia para todos es un documento que habla desde la defensa de la democracia”, afirma Cartoy Díaz.

El telefilm tiene el apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales de la Argentina (INCAA), la escuela de televisión y radio TEA, los canales Telesur y Encuentro de Buenos Aires y el Centro de Formación y Realización Cinematográfica de Bolivia. La dirección estuvo a cargo de Cristian Jure y la producción fue de Silvina Rossi.

Para el productor televisivo el reciente triunfo “ratifica que Evo es el presidente de todos y que ha avanzado en lo que había prometido en la campaña presidencial, con políticas como la distribución de la tierra, la reforma constitucional, la nacionalización de los hidrocarburos, que son avances para la totalidad del pueblo boliviano. En octubre se termina el plan de alfabetización que puso en marcha y será el tercer país de Latinoamérica, siendo tan pobre, que erradica el analfabetismo”.

El documental, en realidad, partió de un convenio con la Organización Internacional del Trabajo para registrar las sesiones de la Asamblea Constituyente boliviana. “Era un registro audiovisual de seguimiento de lo que sucedía en las distintas comisiones, de qué propuestas se presentaban, porque iba a servir como modelo para las posteriores constituyentes de Ecuador y Nepal. Sin embargo, el hecho de estar ahí y ver el contraste entre cómo se cubrían las noticias sobre Bolivia en la Argentina y en España y la violencia, las persecuciones y la política de desgaste que desarrollaban la oligarquía de la Media Luna contra el gobierno de Evo nos impulsaron a producir este telefilme de urgencia”, relata Cartoy Díaz.

Sobre la televisión

Con la experiencia de Las patas de la mentira realizada junto a Miguel Rodríguez Arias -que preanunció programas como PNP, Televisión Registrada y Zapping-, en forma paralela a la cobertura de la Constituyente Cartoy comenzó a grabar el tratamiento que las cadenas televisivas de Bolivia, la Argentina y otros países brindaban sobre los sucesos más importantes del escenario político boliviano. Las imágenes muestran, por ejemplo, como los conductores televisivos interrumpen la cadena nacional para criticar el estilo de Morales o utilizan el recurso de la pantalla partida -como sucedió en la Argentina durante el conflicto con el campo- para desvalorizar en directo el discurso presidencial.

“Evo lleva adelante una verdadera revolución democrática y no ha nacionalizado o intervenido ningún medio, pese a que practican una agresión sistemática sobre su figura, dicen que no está preparado para gobernar o que en realidad sólo gobierna para El Alto”, señala.

También sorprende la virulencia de los partidarios de la Unión Juvenil Cruceñista que se pasean con camionetas que ostentan orgullosas simbologías nazis, gritan consignas como “Collas raza maldita” e insultan y golpean a los indígenas. Contra todas las predicciones, esas imágenes de intolerancia están realizadas por estudiantes de comunicación de la Universidad Católica de Santa Cruz.

El realizador explica: “La derecha boliviana tiene grupos de choques desde 1952. La Unión Juvenil Cruceña representa la cabeza de grupos de acción muy violentos, que golpean, persiguen, amedrentan a los ciudadanos kollas que viven en la periferia de las ciudades de la Media Luna. Los persiguen por portación de cara y en el referéndum tuvieron muchas dificultades para votar porque están atemorizados”.

El montaje de Bolivia para todos recupera elementos del documental político latinoamericano de los 60 (como la división en capítulos de La hora de los hornos) y los reactualiza con herramientas de la edición televisiva actual. “Buscamos que el telefilm emocione, golpee, atrape. Y primero se entra por los ojos, el oído y el corazón de los televidentes, y recién después por la historia, porque la manera de ver televisión es totalmente distinta a la del cine, donde uno está en una sala cerrada y la luz apagada. El ritmo de la televisión actual es vertiginoso”, señala Cartoy.

“Hoy la gente tiene, por efecto de la repetición, un entrenamiento de cierta manera de comunicar ligada a lo televisivo. Entonces, no se puede desconocer cómo recibe el receptor. Así que utilizamos ciertas armas y ciertos recursos para atraerlo, para que se quede prendido de la pantalla. Sin embargo, la estética responde a una narrativa, es un complemento. Me interesa emocionar, que duela, pero que después, cuando uno lo pasa por su tamizador, hayan quedado ideas, aspectos para debatir”, explica.

El fundador de una de las primeras escuelas de televisión de la Argentina no vacila en sus críticas al actual panorama que ofrece la televisión argentina: “Hay mucho material televisivo que ya pierde su sentido antes de pasarse al aire. Aclaro que la televisión necesita entretenimiento, de programas que hagan reír a la gente, que está llena de cosas que a diario la acucian. Pero muchos programas destruyen el valor de la palabra, le quitan sentido. Así devalúan el propio sentido a los acontecimientos”.

Cartoy marca cierto paralelismo entre la televisión y la oferta gastronómica. “Hay productoras que parecen hacer delivery de contenidos, hacen pizza por encargo y ni siquiera tienen la delicadeza de agregarle un poco de azúcar para sacarle el ácido a la salsa de tomate. Hacen milanesas, mucho pancho y hamburguesa. La dieta de la televisión hoy es muy pobre en proteínas”, afirma.

Productor ejecutivo de programas como Tato de América, Good Show, El espejo, La barra de Dolina, Badía y compañía y Magazine For Fai, dice que “Tato Bores, Alejandro Dolina, Víctor Hugo Morales, Tomás Eloy Martínez me enseñaron algo fundamental: el respeto al público. Hoy la televisión necesitaría cinco minutos al final del día con una fe de erratas, derecho a réplica, un defensor del televidente, que repare todos los errores y distorsiones de la realidad que se cometen”.

El triunfo de la historia

El documental presenta testimonios del presidente Morales, el vice Álvaro García Linera, el ex presidente Carlos Mesa y otros actores centrales de la vida boliviana como Víctor Hugo Cárdenas, Xavier Albo y Silvia Rivera. También se puede escuchar el discurso de Branco Marinkovic, presidente de la Federación de Empresarios de Santa Cruz y de la Comisión Pro Santa Cruz y uno de los principales ideólogos del reclamo autonómico contra el gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS).

El intelectual chileno Ariel Dorfman expresa su respaldo al proceso democrático liderado por Morales y revela que Salvador Allende -de quien el autor de La muerte y la doncella fue asesor durante su presidencia- iba a convocar a un referéndum revocatorio cuando fue derrocado por el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973. Dorfman firmó en abril de este año la carta pública “Denunciemos la conspiración para dividir a Bolivia”, en la que junto a otras personalidades como Rigoberta Menchú, Noam Chomsky, Oscar Niemeyer, Elena Poniatowska y Gianni Vattimo advertían que “las acciones subversivas y anticonstitucionales con que los grupos oligárquicos pretenden dividir la nación boliviana, reflejan la mentalidad racista y elitista de estos sectores y constituyen un peligrosísimo precedente, no sólo para la integridad de ese país, sino también para la de otros países de nuestra región”.

En el documental también aportan sus voces los argentinos Ernesto Laclau, Alcira Argumedo, Norberto Galasso, Horacio Verbitsky, Maristella Svampa, Adolfo Pérez Esquivel y Martín Sivak (autor de Jefazo, la biografía sobre Morales), entre otros.

En su testimonio, Ignacio Ramonet -ex director de Le monde diplomatique y uno de los impulsores del Foro Social de Porto Alegre- afirma que
“América Latina quizá sea el continente donde más resistencia ha habido al neoliberalismo de manera masiva y, en parte, esa resistencia ha producido las experiencias políticas que estamos viendo hoy día, con toda su diversidad, en gran parte de la región”.

La llegada de Morales al Palacio Quemado estuvo precedida por diversas luchas sociales, como la Guerra del Agua en Cochabamba en abril de 2000 que marcó un precedente con la expulsión de la empresa norteamericana Bechtel y el traspaso a la estatal SEMAPA; la Guerra del Gas en octubre de 2003; y la Guerra del Agua en febrero de 2005 en El Alto. La defensa de los recursos naturales fue una de las estrategias centrales de articulación entre las organizaciones populares y marcó un giro en la vida política del país.

“Cuando Evo vino por primera vez al Foro Social Mundial, los cocaleros entendieron que la lucha que ellos llevaban, que es tan singular, tenía mucho que ver con la lucha de los algodoneros en Malí, Senegal, Níger o Guatemala”, recuerda Ramonet en el telefilm, y agrega: “Se dieron cuenta que en realidad estaban luchando contra una lógica. Por eso es importante ver estas victorias, porque eso refuerza la idea de que la globalización puede retroceder”.

Tal vez sea esa, entonces, la razón que impulsó a Cartoy Díaz a producir Bolivia para todos. “Estoy cansado de contar historias de derrota, de que todo el día la mayoría de los medios generen desconfianza, impotencia, desesperanza entre la gente. Hay que contar historias de triunfos, que alienten a avanzar en las luchas populares”, concluye el realizador.
Una distribución alternativa

Exhibido por Canal 7 en los días previos al referéndum que ratificó la permanencia de Evo Morales al frente de la presidencia de Bolivia, el telefilm Bolivia para todos será difundido a través de canales alternativos de distribución.

“Nuestro primer frente de batalla es la televisión, porque su carácter masivo nos permite llegar a distintos lugares a los que no tendríamos acceso ni desde la sala de cine, la venta de devedés o una conferencia presencial”, explica Cartoy Díaz, quien entregó de forma gratuita los derechos de televisación en la Argentina al canal estatal.

“La realidad latinoamericana exige un compromiso urgente, no podíamos esperar la llegada de un subsidio o el reintegro por cuota de pantalla y terminar proyectando el telefilme dentro de dos años”, señala el realizador. Las entidades de bien público, escuelas, bibliotecas populares, organizaciones sociales o sindicales, que se acerquen con una carta de autorización también podrán solicitar copias sin cargo en la sede de Radio TEA (Lavalle 2258). Las primeras 500 copias en DVD se regalaron a organizaciones de inmigrantes bolivianos que viven en la Argentina. Y están previstas proyecciones gratuitas y diversos mecanismos de difusión popular del material.

Por Manuel Barrientos
Fuente: Revista Debate
Más información: http://www.revistadebate.com.ar/

Para obtener información sobre el documental
"Bolivia para todos" contactarse a info@radiotea.com.ar

1 comentario:

julio dijo...

Tendrían que realizar un documental para Argentina también que en estos momentos estamos viviendo o pasamos una situación similar a la de Bolivia.