A la luz del caminar, cantando
Dedicado al lobo del Paraná
¿Qué puedo decirte yo, que no lo sepas?
Qué contarte, que no lo hayas oído,
qué cantartesi mi voz no me alcanza
y la noche
me quema entre las sienes la distancia?
Sólo me queda la nostalgia, impía
que vuela con la estrella que se incrusta en la mente
buscando el horizonte, repitiendo los ritos, cruzando el río, la piedra filosofal,
o simplemente, aquel caballo blanco
Mercedes Sosa, Piazzola, los Chalchaleros,
vos, y el estero.
Con las alas que rumbean junto al agua
como cruzando el río de las ansias
sin decirteno te vayas
porque no estás
ni me sirven ya tantas palabras tantas,
ni siquiera las tuyas, para tocar la tierra de mi patria,
aquel pajonal de tierra y cielo
que me educócomo el quebracho
a morirme de pie,y aun cuando ya herida
a galopar en los siglos y en las aguas.
Siempre buscando
buscando en la tormenta de la sangre
o en mi osamenta prendida de escarlata
el trino enternecedor de la calandria adornada con el collar de huevos de la urraca, subida en el árbol paraíso, yo florecida y perfumado
el terraplén,
los ojos bajos
el tren de ida en la mañana,
de madrugadala luz mala,
en las crecidas las mojarras, y en la tarde el sol que iluminaba
otra nueva jornada, el trigo, mares de lino, las vacas, el molino, el girasol, las chatas, tu aguada,
morcilla y pan con mi esperanza
mateando para que juntos
por fin, digamos BASTA.
De una vez y para siempre
BASTA, BASTA
Como afectuosa sombra, sola, bailo
con pasos de ranchera
al pie del muro
adonde quemaremos todas, todos,
las trazas de ese pasado
irreverente y trágico, al ritmo de tu zamba.
Marta Zabaleta©
Londres, 26 de abril 2007
martitacriolla@yahoo.com.arhttp://boards3.melodysoft.com/app?ID=Shaharazad&msg=2256
martes, 1 de mayo de 2007
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